Compromiso de los empleados: actividades
Antes de comenzar a girar números y planificar actividades, debe darse cuenta de que el compromiso de los empleados es una forma de pensar. La única forma en que una estrategia de participación producirá resultados es si comienza con el "por qué" del asunto, con cada actividad y evento que planea.
Empiece por ver a su equipo como personas reales con ideas, aspiraciones, logros y desafíos, dentro y fuera del lugar de trabajo. Estas personas no son un medio para generar resultados comerciales, pero son un recurso formidable que debe entenderse y nutrirse para cumplir con lo que se espera de ellos como trabajadores.
El compromiso de los empleados no es un proceso aislado de recursos humanos. Para que funcione, necesita el compromiso y la participación de la organización para implementar iniciativas eficientes.
Involucrar a los empleados en el proceso de planificación empresarial
Cada 6 meses o incluso trimestralmente, presente los problemas más importantes de su empresa y las acciones que se tomaron para abordarlos. Involucre a su equipo en la planificación anticipada, la evaluación de oportunidades y la creación de ideas de mejora para su estrategia comercial.
Al promover la transparencia y ofrecerles una visión estratégica de cómo se administra la empresa, fomentará la lealtad y también tendrá una línea de liderazgo preparada.
Crear un sistema de intercambio de conocimientos
Uno de los mayores costos de una alta tasa de rotación de empleados es la pérdida de información esencial. Un sistema de intercambio de conocimientos lo ayuda a evitar ese costo hasta cierto punto y también es un gran impulsor de participación para los recién llegados.
Puede tener un programa de tutoría, emparejando empleados experimentados con los recién contratados. Cree una plantilla de programa de aprendizaje que deben seguir, dándoles suficiente espacio para probar sus propios métodos de aprendizaje. Dales un plazo, un conjunto de objetivos y deja que la relación se desarrolle por sí sola.
Fomentar el intercambio de conocimientos de forma creativa
Los equipos a menudo están aislados dentro de su propio proyecto y su propio espacio de trabajo, por lo que no tienen idea de lo que está haciendo el resto de la empresa. Cree un espacio abierto para compartir una vez cada 2 meses aproximadamente, donde cada equipo pueda presentar actualizaciones sobre su proyecto y puntos clave de aprendizaje. Los equipos evolucionarán mucho más rápidamente, utilizando el conocimiento compartido y las diferentes experiencias en cada proyecto.
Para minimizar el riesgo de que esto se convierta en una reunión aburrida y obligatoria de 2 horas, hágalo divertido y creativo. Puede tener un tema por cada sesión para compartir. Por ejemplo, el tema de este mes es "Películas de la mafia" y el equipo de ventas decide presentar sus actualizaciones como si fuera el padrino. Recuerde, la creatividad es un factor clave para la felicidad.
Muéstrales el dinero
Nada genera confianza como mostrarle a alguien su estado financiero y eso es exactamente lo que debe hacer en su empresa. Ofrezca a su equipo una presentación rápida del estado financiero de su empresa, cada trimestre o al final del año. Muéstreles cómo se vinculan los esfuerzos de todos, establezca objetivos audaces para los próximos meses y haga que todos se involucren en el cumplimiento de esos objetivos. Notarás que esta actividad enlaza con la primera.
Fomentar y brindar oportunidades de aprendizaje
Cree su propia Academia, donde los empleados puedan acceder al conocimiento y las oportunidades de desarrollo que necesitan. Esta es una de las 3 razones principales por las que los empleados renuncian a las empresas:lack of learning prospects.
Evalúe sus necesidades y preferencias, cree un plan de estudios y organice de 1 a 2 clases por semana. Hágalos participar para decidir cómo debe programar estas iniciativas de aprendizaje. Hágalo atractivo y gratificante con una ceremonia de graduación, gorras y flores e incluso una noche divertida.
Genere entusiasmo por las próximas oportunidades
Asegúrese de comunicar las próximas oportunidades con regularidad. Haga que los empleados se entusiasmen y se esfuercen por lo que viene. Hágalo en su newsletter interno, presencial o durante una reunión general de actualización.
Si están entusiasmados con lo que sigue, harán todo lo posible y responderán con un "No, gracias" a esos irritantes correos electrónicos de caza furtiva de su competencia. Tenga en cuenta que los procesos profesionales deben estar impulsados por el potencial individual, así como por las oportunidades actuales.
Permítales crear su propia experiencia de incorporación
Crea una experiencia de incorporación autoguiada. Es mucho más probable que las personas recuerden y asimilen la información que obtienen por sí mismos. Establezca las reglas básicas, déles instrucciones básicas, una lista de objetivos y un plazo. Por ejemplo, un plan de 60 días, con algunos hitos básicos.
Déjelos nadar solos. A menudo, los procesos de incorporación no brindan un valor real e inician un diálogo. Permita que los nuevos empleados creen su propia experiencia de incorporación y descubran sus preferencias laborales.
Haga que la incorporación sea divertida
¿Tiene una búsqueda del tesoro a bordo? Convierta la información que generalmente se considera aburrida o inútil en trivialidades de la empresa y aprenda a usar herramientas y sistemas, como el sistema de comunicación interna. Incluya a otras personas en el juego. Por ejemplo, haga que algunos de los empleados mayores den respuestas y conozcan a los nuevos miembros.
Yo soy mi propio jefe
Anime a las personas a diseñar y ser dueños de sus trayectorias profesionales, en lugar de depender de la empresa o de su gerente. Los empleados deben tomar la iniciativa y fijarse una meta profesional. Haga que las personas escriban su meta en una hoja de papel. Ponlo en un sobre y ciérralo. Luego, después de 6 meses o un año, devuélvales los sobres sellados para ver si han logrado ese objetivo. Para esta actividad, los gerentes tienen un papel rector. Pueden comprender y ayudar a alinear las aspiraciones de los empleados con el punto de vista del desarrollo profesional de la organización.