Una de las funciones más importantes de PKI es la función hash. Una función hash mapea los datos de cualquier tamaño arbitrario a datos de tamaño fijo. Bitcoin utiliza la función hash SHA-256 que produce un hash (salida) de tamaño 256 bits (32 bytes). Esto se ilustra en la imagen:
Bob, mientras realiza un pedido con Lisa, crea un mensaje similar al que se muestra arriba. Este mensaje se codifica mediante una función hash que produce un hash de 32 bytes. La belleza de este hash es, a todos los efectos prácticos, que el hash (el número de 256 bits) se considera único para el contenido del mensaje. Si se modifica el mensaje, el valor hash cambiará. No solo eso, dado un valor hash, es imposible reconstruir el mensaje original.
Después de haber visto la importancia del hash, pasemos a otro concepto en Bitcoin que es la minería.